Las empresas que deciden no contar con una asesoría, en ocasiones, se enfrentan a problemas o infracciones tributarias.
Presentar tarde los impuestos, no pagarlos a tiempo, no comunicar un cambio de domicilio fiscal, aceptar el borrador de la renta con datos erróneos, obtener de forma indebida beneficios o incentivos fiscales… Todas ellas son situaciones más comunes de lo que pueda parecer.
Cometer una infracción tributaria conlleva una sanción. Por eso es importante que conozcas las clases de infracciones que hay.
La Ley General Tributaria (LGT) es compleja. Por eso, contar con un gestor o un asesor que te informe y te indique cómo actuar con tu empresa, es el camino más seguro para no cometer ninguna infracción y tener que afrontar el “castigo”.
Tu Asesoría te cuenta qué clases de infracciones tributarias hay:
Dependiendo de la gravedad, las infracciones se clasifican en leves, graves y muy graves.
- Infracciones leves. Cuando la base de la sanción no supere los 3.000 euros. Exista o no ocultación. La multa es proporcional al 50%.
- Infracciones graves. Si la base de la sanción es superior a 3.000 euros y ha habido ocultación. La multa será entre 50 y el 100%.
- Infracciones muy graves. Cuando se usen medio fraudulentos o las cantidades a las que se refiera la infracción sean superiores al 50% de la base sancionable. La multa proporcional será del 100 al 150%.
Otras sanciones
Además de las multas económicas, Hacienda puede sancionar de otra manera, por ejemplo, inhabilitándonos para ejercer nuestra profesión entre tres y doce meses.
Sin saberlo, un empresario puede incurrir en una de estas infracciones. Para evitarlo o salir de esta situación es necesario contar con el asesoramiento legal de expertos.
En la asesoría de Smartup Consulting contamos con un amplio departamento de profesionales con amplia experiencia en este campo.
